¿Qué son los valores humanos?
“La Verdad es lo que debemos practicar, Rectitud es la manera en que debemos vivir, Paz debe ser la marca de nuestra personalidad, y el Amor es nuestra naturaleza”
Sathya Sai Baba
Hace muchos años, Sai Baba dijo: “La política sin principios, la educación sin carácter, la religión sin amor, la ciencia sin humanidad y el comercio sin ética no sólo son inútiles, sino absolutamente peligrosos”. Al observar hoy el estado del mundo en que vivimos, no importa de qué país se trate, vemos qué significativas son estas palabras.“Los valores de Verdad, Rectitud, Paz, Amor y No violencia son permanentes y eternos, son comunes a todas las personas de todos los lugares, razas y credos. No son algo que necesiten adquirirse de nuevo. Ellos nacen con ustedes, son innatos. No pueden ser enseñados, deben ser comprendidos.
Como están ocultos en su interior, no son conscientes de ellos. De la misma forma en que se ocultan objetos valiosos en cajas de seguridad, dentro de ustedes están las joyas valiosas de los valores humanos. Deben protegerlos apropiadamente. Ellos están cubiertos por las puertas del corazón. Ustedes deben ganar la llave del amor para obtenerlos. Cuando la cerradura del corazón se abre con la llave del amor, las valiosas cualidades de los valores humanos emergen.
Ustedes son la encarnación de la Paz. Por lo tanto, busquen en su interior. Conózcanse a sí mismos. Entonces lo sabrán todo. En lugar de interrogar a otros diciendo “¿quién eres tú?”, pregúntense “¿quién soy yo?”. Comprenderán entonces la verdad. Ustedes son la encarnación de la Verdad, del Amor; de la Rectitud y de la No Violencia. Ustedes son todo, y todo se halla en ustedes. Desarrollen esta amplitud mental. Expandan el amor, no lo contraigan. La unidad puede ser lograda solamente a través de la expansión del amor. Sólo cuando el hombre cultiva el sentimiento de amor, puede haber igualdad.”
“El Amor en la palabra es Verdad.
El Amor en la acción es Rectitud.
El Amor en el pensamiento es Paz".
El hombre reza por la Paz, pero en la medida en que tenga deseos, jamás alcanzará la paz. La mente es la base de los deseos, y deben ponerle un límite. Para alcanzar la paz hay que controlar a la mente.
El cuarto valor humano es el Amor. Éste se ha originado del principio del Atma (el Uno indivisible que se manifestó en muchos). El Amor es la manifestación de la Verdad. Como el Atma, es puro, estable, radiante, sin atributos, sin forma, ancestral, eterno, inmortal y nectarino. Éstas son las nueve cualidades del Amor. El amor no odia a nadie, unifica a todos.
La No violencia es la consecuencia de la comprensión de los otros cuatro valores, es decir, la Verdad, la Rectitud, el Amor y la Paz.
Sin embargo, la enumeración de estos valores como cinco no es correcta: son todas facetas de la misma cualidad humana. Crecen juntos y son interdependientes. No se pueden separar. El amor prospera en la paz, en la ausencia de conflicto, ¿cómo puede uno tener paz cuando se complace con la violencia en el pensamiento, en la palabra y en la acción?”El Amor en la comprensión es No violencia.”
LOS VALORES HUMANOS Y SU RELACIÓN CON LOS CINCO ELEMENTOS
“El arco iris en el cielo se forma por la dispersión de un único rayo de luz blanca pura por las gotas de lluvia. Simboliza la multiplicidad en la naturaleza causada por el prisma de la mente. La diversidad de los cinco elementos en la creación tiene su origen en la pura Luz Divina interior. La revelación de esta Verdad es Educare”.- Sathya Sai Baba
Sathya Sai Baba constantemente llama la atención sobre el hecho de que el hombre tiene una fuerte relación con los cinco elementos de la Naturaleza (éter, aire, fuego, agua y tierra). Como parte integral de la naturaleza, el cuerpo humano también está compuesto por los cinco elementos, que están tanto dentro como fuera de él. La creación en su conjunto, incluido el hombre, no es otra cosa que las distintas formas que aparecen y desaparecen gracias a las múltiples combinaciones de estos cinco elementos.
Todo el tiempo intercambiamos estos elementos con la naturaleza. Si ingerimos una comida los elementos que la componen son asimilados al cuerpo, mientras otro tanto regresa de nuevo a la naturaleza a través de la excreción.
A su vez, toda la creación está sustentada por la energía divina del amor. El Uno se convirtió en muchos. Entonces, el amor que sostiene y activa a todos los elementos en el cosmos también sostiene y activa al hombre. Sathya Sai Baba afirma que no sólo la creación está impregnada de amor, sino que el amor es la corriente que subyace al resto de los valores humanos. Si contemplamos la naturaleza, podemos observar que está saturada de estos valores.
Tanto en su forma animada como inanimada, vemos que cada componente del Ecosistema coopera amorosamente entre sí: el mundo mineral sostiene la vida, el vegetal se nutre de éste y del sol, y a su vez alimenta a los animales y a los humanos. Esto es posible porque cada uno sigue su Dharma (acción correcta). Los ejemplos sobran: los planetas siguen su órbita, los animales su instinto, y los vegetales su desarrollo y florecimiento. El orden resultante del amor y del dharma da como resultado la paz: esto explica por qué la buscamos en la naturaleza. Y cuando vemos que todos sus componentes toman sólo lo que necesitan, comprendemos que está impregnada de no-violencia.
En síntesis, cualquier mirada que vaya más allá de lo material puede observar que los cinco valores son inherentes a los cinco elementos de la naturaleza. Esta relación resulta aun más evidente cuando observamos el estado actual del planeta. Los elementos de la naturaleza fueron diseñados para estar en perfecta armonía y los cinco elementos en el hombre también deberían estarlo. Pero el ser humano ha fallado en lograr este balance dentro de sí mismo al ignorar los cinco valores, y como resultado es responsable del desequilibrio de los cinco elementos en la Naturaleza, que se manifiesta en forma de catástrofes ecológicas. Esta estrecha relación entre los cinco elementos y los cinco valores es la causante del desastre actual, pero también es la clave de la solución. Por eso, en respuesta a la pregunta sobre cómo puede el hombre restaurar este desequilibrio tanto dentro de sí como en la creación entera, Sathya Sai Baba respondió “Sólo puede lograrlo practicando los cinco Valores Humanos”.
Sathya Sai Baba constantemente llama la atención sobre el hecho de que el hombre tiene una fuerte relación con los cinco elementos de la Naturaleza (éter, aire, fuego, agua y tierra). Como parte integral de la naturaleza, el cuerpo humano también está compuesto por los cinco elementos, que están tanto dentro como fuera de él. La creación en su conjunto, incluido el hombre, no es otra cosa que las distintas formas que aparecen y desaparecen gracias a las múltiples combinaciones de estos cinco elementos.
Todo el tiempo intercambiamos estos elementos con la naturaleza. Si ingerimos una comida los elementos que la componen son asimilados al cuerpo, mientras otro tanto regresa de nuevo a la naturaleza a través de la excreción.
A su vez, toda la creación está sustentada por la energía divina del amor. El Uno se convirtió en muchos. Entonces, el amor que sostiene y activa a todos los elementos en el cosmos también sostiene y activa al hombre. Sathya Sai Baba afirma que no sólo la creación está impregnada de amor, sino que el amor es la corriente que subyace al resto de los valores humanos. Si contemplamos la naturaleza, podemos observar que está saturada de estos valores.
Tanto en su forma animada como inanimada, vemos que cada componente del Ecosistema coopera amorosamente entre sí: el mundo mineral sostiene la vida, el vegetal se nutre de éste y del sol, y a su vez alimenta a los animales y a los humanos. Esto es posible porque cada uno sigue su Dharma (acción correcta). Los ejemplos sobran: los planetas siguen su órbita, los animales su instinto, y los vegetales su desarrollo y florecimiento. El orden resultante del amor y del dharma da como resultado la paz: esto explica por qué la buscamos en la naturaleza. Y cuando vemos que todos sus componentes toman sólo lo que necesitan, comprendemos que está impregnada de no-violencia. En síntesis, cualquier mirada que vaya más allá de lo material puede observar que los cinco valores son inherentes a los cinco elementos de la naturaleza. Esta relación resulta aun más evidente cuando observamos el estado actual del planeta. Los elementos de la naturaleza fueron diseñados para estar en perfecta armonía y los cinco elementos en el hombre también deberían estarlo. Pero el ser humano ha fallado en lograr este balance dentro de sí mismo al ignorar los cinco valores, y como resultado es responsable del desequilibrio de los cinco elementos en la Naturaleza, que se manifiesta en forma de catástrofes ecológicas. Esta estrecha relación entre los cinco elementos y los cinco valores es la causante del desastre actual, pero también es la clave de la solución. Por eso, en respuesta a la pregunta sobre cómo puede el hombre restaurar este desequilibrio tanto dentro de sí como en la creación entera, Sathya Sai Baba respondió “Sólo puede lograrlo practicando los cinco Valores Humanos”.
Programa Sathya Sai de Educación en Valores Humanos
“La educación no es para la mera subsistencia; es para la vida, una vida más plena, con más sentido, más útil. No hay nada malo en que también se la utilice para obtener un empleo remunerativo. Sin embargo, el hombre educado debe ser consciente de que la existencia no lo es todo, que el empleo no lo es todo. La educación no es para desarrollar la facultad de la discusión, la crítica o para obtener una eventual victoria sobre sus oponentes, o exhibir su maestría del lenguaje o la lógica. El mejor estudio es el que les enseña a conquistar este ciclo de nacimiento y muerte, y que hace que no se vean perturbados por la fortuna o los golpes del destino. Este estudio comienza donde ese estudio de ustedes termina.” - Sathya Sai Baba
La mayoría de los educadores reconocen que una parte importante de la misión de la educación es transmitir el conocimiento y las habilidades necesarios para navegar a través de este viaje de la vida en forma segura, eficaz y con algo de felicidad. No obstante, en nuestros modernos sistemas educacionales, con demasiada frecuencia se pone un énfasis abrumador en la adquisición de habilidades y conocimientos que permitan al estudiante encontrar un empleo o practicar una profesión.Con demasiada frecuencia el proceso educacional se convierte en una procesión de estudiantes que pasan a través de un ejercicio mecánico. La educación mundana en muchos lugares se ha vuelto una línea de montaje en la que ‘educar’ significa ‘matricular, inculcar y luego graduar’.
La preocupación por este aspecto distorsiona el papel más profundo e importante de la educación. Sri Sathya Sai Baba afirma: “El fin de la educación es el carácter”. Él ha declarado que los atributos del carácter se encuentran en aquél que practica los valores humanos universales de Amor, Verdad, Rectitud, Paz y No violencia. Finalmente, nos ha asegurado que estos valores son inherentes a todos nosotros y emergerán y prevalecerán en nuestro ser a medida en que lleguemos a conocernos a nosotros mismos. El mensaje es: primero, ir hacia dentro y conocernos; luego sacar a relucir los Valores Humanos que permanecían dormidos y finalmente, aplicar estos valores en nuestras vidas diarias. Este proceso de Educare puede transformarnos individualmente, luego a la familia, la sociedad, la nación y finalmente al mundo entero. La paz que Educare nos confiere individualmente es la piedra fundamental de la paz mundial.
El rol de los maestros
“Pueden enseñar amor a sus estudiantes sólo a través del amor”
-Sathya Sai Baba
-Sathya Sai Baba
“No puedo escucharte porque tus acciones hablan más fuerte”, dice un sabio dicho popular. Es por eso que el rol del maestro es clave en Educare.
Los maestros deben esforzarse por ser modelos de los valores humanos que constituyen el núcleo del programa. Ellos deben ser ejemplos vivientes. Esto nos recuerda a los grandes filósofos-maestros de la antigua Grecia, como Sócrates, que enseñaban no sólo hablando y explicando sino demostrando los ideales elevados que ellos abrazaban a través de su noble carácter. También nos recuerda a los grandes santos y sabios de todas las religiones, quienes enseñaron e inspiraron, instruyeron y transformaron a miles con su ejemplo.
Los miles de educadores que se han dedicado a lo largo de los años a llevar la Educación Sathya Sai a cada región del planeta, siempre permanecieron enfocados en su misión de llevar luz y amor al mundo a través de Educare.
Los maestros deben esforzarse por ser modelos de los valores humanos que constituyen el núcleo del programa. Ellos deben ser ejemplos vivientes. Esto nos recuerda a los grandes filósofos-maestros de la antigua Grecia, como Sócrates, que enseñaban no sólo hablando y explicando sino demostrando los ideales elevados que ellos abrazaban a través de su noble carácter. También nos recuerda a los grandes santos y sabios de todas las religiones, quienes enseñaron e inspiraron, instruyeron y transformaron a miles con su ejemplo.
Los miles de educadores que se han dedicado a lo largo de los años a llevar la Educación Sathya Sai a cada región del planeta, siempre permanecieron enfocados en su misión de llevar luz y amor al mundo a través de Educare.
Los distintos sistemas del PSSVH
El Programa Sathya Sai en Valores Humanos se distingue por promover el uso de los conocimientos académicos para el beneficio de toda la humanidad, y busca que el estudiante lleve una vida con un sentido más sublime que el común denominador, al aspirar al desarrollo espiritual e intelectual en forma conjunta. Para promover el despertar de estos valores, Sathya Sai Baba estableció un sistema educacional en India completamente gratuito de colegios primarios y secundarios y una acreditada Universidad con posgrado, que apunta tanto al desarrollo del carácter como a la excelencia académica. El Programa Sathya Sai de Educación en Valores Humanos (PSSEVH) es presentado en forma directa como un plan de clases separado aplicando distintas técnicas para el desarrollo completo del potencial humano, y en forma indirecta incorporando los principios y los valores al plan de estudio (currícula), en los que los cinco valores impregnan las diversas materias escolares. Además es practicado en todas las actividades extracurriculares.
Sin embargo, los PSSEVH no solo proporcionan educación formal en los tres niveles –primario, secundario y universitario- sino que además ofrecen una amplia y variada educación no formal fuera de la escuela. Esta educación se imparte en los centros y grupos Sai de todo el mundo y en escuelas complementarias, a través de talleres y seminarios para niños, adolescentes y adultos. En ellos se combinan distintas técnicas diseñadas para abarcar los distintos aspectos del ser humano; como actividades grupales, relatos, visualizaciones creativas, meditación en la luz, canciones y juegos.
Sin embargo, los PSSEVH no solo proporcionan educación formal en los tres niveles –primario, secundario y universitario- sino que además ofrecen una amplia y variada educación no formal fuera de la escuela. Esta educación se imparte en los centros y grupos Sai de todo el mundo y en escuelas complementarias, a través de talleres y seminarios para niños, adolescentes y adultos. En ellos se combinan distintas técnicas diseñadas para abarcar los distintos aspectos del ser humano; como actividades grupales, relatos, visualizaciones creativas, meditación en la luz, canciones y juegos.
La universalidad de este sistema se hace evidente cuando observamos su repercusión en el mundo: más de 170 países la han adoptado con éxito. De este modo, la verdadera educación se vuelve un proceso de transformación que dura toda la vida. Los estudiantes buscan y encuentran respuestas a las preguntas perpetuas: ¿Quién soy yo? ¿Por qué estoy aquí? ¿Qué debo hacer para obtener una felicidad duradera y profunda? ¿Cómo puedo alcanzar el más alto bien para mí mismo y para el mundo?
El Programa Sathya Sai de Educación en Valores Humanos es un todo en sí mismo: es universal.
Da por resultado la más profunda transformación y la mayor felicidad para estudiantes y maestros por igual.
El fin de la sabiduría es la Libertad,
El fin del conocimiento es el Amor,
El fin de la educación es el Carácter. -Sathya Sai Baba
Educare en Latinoamérica
Es difícil dar cuenta del cambio revolucionario y silencioso que está teniendo lugar en Latinoamérica, como en otras partes del mundo. Se llama Educare y nos invita a ser parte de él, a experimentarlo. Son tantos los países, las ciudades y pueblos, son tantas las familias y los corazones. En las próximas páginas intentaremos guiarlos a través de este milagro que está ocurriendo aquí y ahora: la Educación Sathya Sai en Valores Humanos.
Educare: El sistema de Educación Sathya Sai en Valores Humanos
“El hombre debe conocer la Suprema Verdad del Único Ser detrás de todo lo que existe, o al menos conocer la Verdad práctica del Amor y la Hermandad. Estos dos puntos son los límites que la educación debe tener siempre en mente, el punto de partida y la meta.”
Sri Sathya Sai Baba
La piedra angular filosófica de la Educación Sathya Sai es el concepto de Educare. Sathya Sai Baba hace una distinción entre lo que se considera tradicionalmente como ‘educación’ y lo que él llama ‘Educare’. “¿Cuál es el significado fundamental de Educación? La palabra deriva de la raíz latina Educare, que significa ´extraer lo que está adentro’.”
Los principios rectores del término Educare, como lo utiliza Sathya Sai Baba, son:
• La divinidad es amor, y es la corriente subyacente de todos los valores humanos;
• Educare saca a relucir los valores humanos inherentes y los traduce a la acción en la vida cotidiana;
• El propósito de la educación es llevar una vida plenamente humana y espiritual;
• El fin de la educación es el carácter y el carácter se manifiesta como la unidad de pensamiento, palabra y acción.
• Los principios comprendidos en el concepto de Educare se aplican a todos.
“El hombre debe conocer la Suprema Verdad del Único Ser detrás de todo lo que existe, o al menos conocer la Verdad práctica del Amor y la Hermandad. Estos dos puntos son los límites que la educación debe tener siempre en mente, el punto de partida y la meta.”
Sri Sathya Sai Baba
La piedra angular filosófica de la Educación Sathya Sai es el concepto de Educare. Sathya Sai Baba hace una distinción entre lo que se considera tradicionalmente como ‘educación’ y lo que él llama ‘Educare’. “¿Cuál es el significado fundamental de Educación? La palabra deriva de la raíz latina Educare, que significa ´extraer lo que está adentro’.”
Los principios rectores del término Educare, como lo utiliza Sathya Sai Baba, son:
• La divinidad es amor, y es la corriente subyacente de todos los valores humanos;
• Educare saca a relucir los valores humanos inherentes y los traduce a la acción en la vida cotidiana;
• El propósito de la educación es llevar una vida plenamente humana y espiritual;
• El fin de la educación es el carácter y el carácter se manifiesta como la unidad de pensamiento, palabra y acción.
• Los principios comprendidos en el concepto de Educare se aplican a todos.
Desde sus tempranos comienzos en India a fines de 1960, la Educación Sathya Sai se ha difundido en todas partes del mundo y es practicada por educadores en diversos escenarios culturales. En líneas generales, la Educación Sathya Sai puede ser clasificada en las siguientes categorías:
EDUCACION FORMAL
|
EDUCACION NO FORMAL
|
EDUCACION INFORMAL
|
| Escuelas Sathya Sai | Bal Vikas/Educación Espiritual Sai para niños | Discursos de Sri Sathya Sai Baba |
| ESSVH en escuelas estatales y privadas | ESSVH en la comunidad | Revista Sanathana Sarathi (El Eterno Conductor) |
| ESSVH en Institutos de Educación Sathya Sai (IESS) | ESSVH para adolescentes y jóvenes adultos | Serie Vahini de Sri Sathya Sai Baba |
| Colleges Sathya Sai | Programas de paternidad Sathya Sai | Conferencias de Educación Sathya Sai |
| Universidad Sri Sathya Sai | Círculo de estudios en Centros Sri Sathya Sai Baba | |
| Radio Sai Global Harmony (Radio Sai Armonía Mundial) | ||
| Sitios web de información |
Las Escuelas, los Colleges, los Institutos de Educación Sathya Sai (IESS) y la Universidad Sri Sathya Sai implementan la filosofía de Educación Sathya Sai en ambientes académicos formales y de forma gratuita. Todas estas instituciones han recibido grandes elogios de líderes nacionales, autoridades educacionales, evaluadores independientes, del sector corporativo y de agencias internacionales tales como las Naciones Unidas. La Universidad Sri Sathya Sai en India ha sido considerada la ‘Joya más preciosa’ del sistema de educación universitaria por el cuerpo nacional de acreditación más alto de la India (University Grants Comission). La razón de este éxito es que la Educación Sathya Sai proporciona un modelo que combina la educación espiritual y secular, y alcanza tanto la excelencia académica como la excelencia de carácter en los estudiantes.
Escuelas Sathya Sai en Latinoamérica
Las Escuelas Sathya Sai aplican Educare en su Proyecto Educativo Institucional y son supervisadas por el Instituto Sathya Sai de Educación en Valores Humanos. Todas las Escuelas Sathya Sai del mundo siguen el currículum estatal y hacen dar a sus estudiantes exámenes estatales regulares en las diferentes etapas. Los resultados de tales evaluaciones muestran que el nivel de las Escuelas Sathya Sai es de primera clase. 
Por ejemplo, la Escuela Sathya Sai de Toronto, Canadá, superó las expectativas provinciales en el EQAO en las tres áreas de Lectura, Escritura y Matemática. El resultado de la Escuela fue de 100 por ciento en comparación con el promedio de 61 a 64 por ciento para el Estado de Ontario. Las Escuelas Sathya Sai de Australia, India, Latinoamérica, Sudáfrica, Tailandia y Zambia han registrado logros académicos similares. En América Latina, la Escuela Sathya Sai de Abejales, Venezuela, fue declarada “Escuela Rural Modelo” en 2004, tan solo dos años después de su fundación. El Ministerio de Educación de ese país tomó en cuenta la calidad de la enseñanza que se imparte en la Escuela, y sobre todo las condiciones en las cuales se desempeña y la forma de atender a los alumnos. En Argentina, el programa Educare fue declarado de Interés Educativo y Cultural en las provincias de Buenos Aires, Mendoza, Misiones, San Luis, y Salta.
El crecimiento de las Escuelas Sathya Sai de Latinoamérica ha sido rápido durante los últimos seis años. Actualmente hay un total de catorce Escuelas Sathya Sai en los siguientes países:
Argentina
• Escuela Sathya Sai Mahatma Gandhi en Castelar, Buenos Aires Brasil• Escola Sathya Sai de Goiás
• Escola Sathya Sai de Pernambuco- Jaboatão, PE
• Escola Sathya Sai de Minas Gerais
• Escola Sathya Sai Ribeirão Preto, Sāo Paulo
• Escola Sathya Sai de Vila Isabel, Rio de Janeiro
Ecuador • Escuela Sathya Sai Bahía de Caráquez
• Escuela Sathya Sai de Guayaquil
Guatemala • Escuela Sathya Sai- Guatemala
México • Escuela Sathya Sai Rayénari - Chihuaua
• Escuela Sathya Sai de Cuernavaca
Paraguay
• Escuela Sathya Sai “Gotas de luz” de Asunción Perú
• Escuela Sathya Sai de Valores Humanos de Tiabaya- Arequipa
Venezuela
• Escuela Sathya Sai de Abejales
Asociaciones en la Educación Sathya Sai en Latinoamérica
La Educación Sathya Sai en Valores Humanos (ESSVH) no termina en las Escuelas Sathya Sai. En Latinoamérica hay una gran cantidad de escuelas que se han asociado a la Educación Sathya Sai y la imparten de distintas maneras. Actualmente, más de 180 escuelas latinoamericanas estatales forman asociaciones con los Institutos de Educación Sathya Sai, presentes en la mayoría de los países de la región.Tales asociaciones florecen cuando el director o el administrador de una escuela desea introducir una cultura de educación en valores humanos, a menudo debido a problemas tales como rendimiento académico pobre, problemas de disciplina, caída de la asistencia y fracaso educacional general. En esos casos los niveles de motivación son altos y la voluntad colectiva de todos los maestros apoya el programa.
El compromiso de los Institutos con programas de ESSVH en escuelas de Latinoamérica está clasificado de la siguiente forma:
• Escuelas adoptadas: escuelas públicas o privadas que solicitan el programa de ESSVH. Los maestros de estas escuelas son capacitados por el Instituto de Educación Sathya Sai (IESS). En algunos casos, el cuerpo docente del IESS da clases junto con los maestros regulares, y en otros monitorean el modo en que los maestros dan el programa.
• Escuelas parcialmente adoptadas: escuelas públicas o privadas en las que uno o más maestros han obtenido el Diploma del IESS y utilizan la metodología de ESSVH.
• Escuelas piloto: escuelas públicas seleccionadas conjuntamente por el Ministerio de Educación y el IESS para desarrollar programas de ESSVH. El IESS capacita a los maestros y monitorea el progreso en forma continua.
• Escuelas complementarias: son escuelas fuera del horario de clases regulares, para niños y adolescentes de 5 a 15 años. Funcionan de forma periódica (semanal o diariamente) y son administradas enteramente por el IESS o por voluntarios. Tales escuelas están fuera del campo de acción del Ministerio de Educación. La ESSVH es integrada a una variedad de clases tales como arte, drama, danza, computación, jardinería orgánica, cocina, música, manualidades y apoyo escolar. El personal docente está formado por voluntarios y por maestros profesionales pagos.
• Escuelas vocacionales: similares a las escuelas complementarias excepto que son para adolescentes más grandes y para jóvenes usualmente de más de 20 años. En estas escuelas la ESSVH es combinada con habilidades vocacionales básicas, por ejemplo, lectura, escritura, cocina, higiene; y se coloca el foco en preparar a los estudiantes para oficios o trabajos que requieran habilidades simples.
• Escuelas parcialmente adoptadas: escuelas públicas o privadas en las que uno o más maestros han obtenido el Diploma del IESS y utilizan la metodología de ESSVH.
• Escuelas piloto: escuelas públicas seleccionadas conjuntamente por el Ministerio de Educación y el IESS para desarrollar programas de ESSVH. El IESS capacita a los maestros y monitorea el progreso en forma continua.
• Escuelas complementarias: son escuelas fuera del horario de clases regulares, para niños y adolescentes de 5 a 15 años. Funcionan de forma periódica (semanal o diariamente) y son administradas enteramente por el IESS o por voluntarios. Tales escuelas están fuera del campo de acción del Ministerio de Educación. La ESSVH es integrada a una variedad de clases tales como arte, drama, danza, computación, jardinería orgánica, cocina, música, manualidades y apoyo escolar. El personal docente está formado por voluntarios y por maestros profesionales pagos.
• Escuelas vocacionales: similares a las escuelas complementarias excepto que son para adolescentes más grandes y para jóvenes usualmente de más de 20 años. En estas escuelas la ESSVH es combinada con habilidades vocacionales básicas, por ejemplo, lectura, escritura, cocina, higiene; y se coloca el foco en preparar a los estudiantes para oficios o trabajos que requieran habilidades simples.
Garantía de Calidad
La Organización Sri Sathya Sai de la región desarrolló un plan sistemático para la garantía de calidad de las Escuelas Sathya Sai basado en el SAI 2000 (un conjunto de normas sobre acreditación e inspección creado en ese año). A su vez, las Escuelas Sathya Sai están sometidas a los requerimientos jurisdiccionales de los Ministerios de Educación locales. Como en ellas se coloca un énfasis único en la transformación del carácter de los estudiantes basado en la espiritualidad, la Organización Sri Sathya Sai toma el compromiso de monitorear la calidad de las Escuelas.La planificación de la garantía de calidad de las Escuelas Sathya Sai en Latinoamérica comenzó en 2002 con un Congreso de todos los Institutos Sathya Sai de la región. Allí se desarrollaron guías para la garantía de calidad basadas estrechamente en el SAI 2000, y se nombraron inspectores calificados que están activamente comprometidos en la administración y la garantía de calidad de las Escuelas en sus respectivos países. El propósito de tales inspecciones es garantizar que las Escuelas Sathya Sai brinden excelencia académica y humana.
El clima en las Escuelas
variedad de personas incluyendo a funcionarios de Ministerios de Educación en visitas de acreditación, funcionarios gubernamentales locales, padres, maestros, directores y por los propios estudiantes.Así lo describe el Diario La Nación de Venezuela en una nota de febrero de 2007:
“Visitar y recorrer las instalaciones del instituto es respirar tranquilidad y paz. Allí todo es orden y cada cosa está en su justo lugar. Impecable desde la fachada, hasta el último rincón. Tiene una pequeña huerta que los mismos alumnos, guiados por sus maestras, se esmeran en cuidar y mantener. Y en uno de los espacios principales, cercano al comedor y la cocina, está el salón que sus fundadores han destinado como sitio de meditación y desde donde se promueven el amor y la no violencia ni humana, ni a plantas ni a animales, tal como lo explicó Raquel Reinoso, coordinadora general y representante en Abejales de la Fundación Sai Baba, cuya sede principal está en Caracas”. Los informes de las Escuelas Sathya Sai alrededor del mundo se hacen eco de la misma atmósfera de paz y felicidad que reina en sus aulas.
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